Empezaré este artículo confesando que jamás imaginé el nivel
de deterioro intelectual, político, social y moral en el que caería la República,
aunque bien, era previsible la caída económica del modelo socialista. A lo
largo de mi vida, he estudiado la historia de Venezuela y siempre he llegado a
la misma conclusión, Venezuela es una nación que no ha terminado de
constituirse.
Venezuela fue el único país del continente cuya guerra de
independencia duró 13 años, contados desde la declaración de independencia, el
19 de abril de 1810 hasta la capitulación del último Capitán General de
Venezuela, el español Francisco Tomás Morales, en Maracaibo, el 3 de agosto de
1823.
Si hiciéramos un paralelismo con la historia de Venezuela, diríamos
que Venezuela vive una situación mucho peor que la vivida en la época de José
Tomás Boves, Boves fue quizás el primer caudillo popular, aquél hombre usó en
sus discursos retóricos, los resentimientos de clase, explotaba las diferencias
raciales entre blancos acaudalados y pardos, negros e indios pobres, esos
rencores vivían en él, pues la sociedad mantuana lo rechazaba. Con la promesa
de venganza, ascenso social y poder, Boves caló en las poblaciones pobres muy
rápido, llegando a ser una amenaza para los independentistas.
De igual forma surgió, de nuevo, una ideología que se basa
en el falso nacionalismo, en el rencor y la lucha de clases, disfrazada bajo el
concepto de justicia social pero que en la práctica ha generado una clase
empobrecida y otra sumamente rica, de funcionarios y amigos del gobierno.
El populismo ha degenerado la sociedad a tal punto de ver
venezolanos peleando por un pedazo de pernil o un juguete para sus hijos, el régimen
madurista vio la oportunidad de controlar a la población a través de la
alimentación al mejor estilo cubano.
Jamás en la historia de Venezuela se había visto tanta
corrupción, familiares del presidente condenados por narcotráfico, un
vicepresidente acusado de ser pieza clave para el tráfico internacional de drogas,
un régimen corrupto y cruel que juega con la vida de millones de venezolanos
con el fin de mantener el poder, la muerte de venezolanos en las calles por
acción de la Guardia Nacional y la Policía Nacional, en los hospitales por
falta de medicina, en las esquinas por culpa de la delincuencia, niños
desnutridos y cientos de miles de personas saliendo por las fronteras huyendo
de situaciones que asombraría hasta a Dante Alighieri aquél que describió el
infierno.
Y es así como este hombre ignorante y despiadado que
gobierna Venezuela dirige al igual que Boves, una Legión Infernal. El mundo ha
sido testigo de los desmanes de este régimen que se atrevió a armar poblaciones
civiles en contra de civiles desarmados, que se atrevió por primera vez a meter
tanquetas a urbanizaciones, a entrar a las casas a buscar jóvenes, dispararles
y asesinarlos sin piedad ni temor, hablo de la Guardia Nacional Bolivariana,
que es un órgano que debe ser desintegrado y suprimido de la Fuerza Armada.
La actual Fuerza Armada Nacional ha sido cómplice de las
violaciones a la constitución, de los crímenes del régimen y de los altos
niveles de corrupción generalizada.
El Tribunal Supremo de Justicia es presidido por un
delincuente cuyo prontuario se encargó el mismo gobierno de borrar y limpiar,
en una acción sin precedentes para la justicia venezolana.
La Fiscalía General fue tomada mediante un golpe de Estado,
promovido por Maduro a través de la llamada Asamblea Constituyente electa bajo
acciones fraudulentas.
La Asamblea Constituyente cuyos miembros deben ser juzgados
por su complicidad en la violación sistemática de la constitución y que avalan
las acciones ilegales del régimen.
La Contraloría General que es controlada por el compadre de
Maduro y cuyo contralor ha caído en los peores casos de nepotismo moderno.
El Estado hoy es usurpado por unos sátrapas, que no pierden
tiempo en violar la constitución. Venezuela dejó de ser un país
descentralizado, no tiene separación de poderes, no goza de elecciones libres,
y en el último acto de criminalidad de su régimen dictatorial, han creado la
llamada criptomoneda El Petro, que es una nueva estafa con la que terminarán de
desangrar el país.
El actual dictador venezolano es un hombre sumamente
ignorante, tan ignorante que es una amenaza para la región, por el poder que
tiene, con las mayores reservas de petróleo del mundo, este hombre está rodeado
de otros ignorantes como su asesor económico, el español Alfredo Serrano
Mancilla, este entre otros es el responsable de las absurdas medidas económicas
que toma Nicolás Maduro.
Las distorsiones macroeconómicas de Venezuela son tan
grandes que ni siquiera las mayores reservas de petróleo del mundo pueden
sostener la vida económica de 30 millones de personas. La falta de libertades económicas
que ha producido el llamado Socialismo
del Siglo XXI, mediante el hostigamiento a la propiedad privada, las
expropiaciones, el control de precios del dólar, los controles de precios de
innumerables productos de consumo nacional, la intervención constante del
gobierno y la Guardia Nacional en las contadas empresas productivas del país aunado a la caída de los
precios del petróleo aumentaron la crisis.
Pero sobre todo la gran cantidad de dinero que se han robado
los funcionarios y empresarios chavistas, cuya nueva estafa es El Petro. Una
criptomoneda, es una moneda virtual descentralizada (no depende de ningún Banco
Central) cuya seguridad depende del procesamiento de algoritmos que producen
miles o quizás millones de ordenadores, que hacen cada vez más fuerte el código,
a través del método de enjambre, lo que hace imposible hackear dicho código.
El valor de una criptomoneda, lo define la oferta que es
determinada por la capacidad de procesamiento y la demanda, miles de
inversionistas y usuarios que acuden a ellas para hacer comercio. La tecnología
Blockchain, o bloques de cadena que hacen tan seguras las criptomonedas, es lo
más importante porque incluso podría garantizar los procesos electorales en el
mundo, este será el tema de discusión en la próxima década.
Pero, ¿cómo puede un gobierno cuyo manejo de las libertades
económicas ha llevado a la economía del país con más recursos de América Latina
a la quiebra, hacer que vean atractiva su criptomoneda? La respuesta: Es
imposible. Pero sobre las maravillas de las criptomonedas también hay un lado
oscuro, y es el uso de ellas en acciones ilegales, en la DeepWeb, que es el
lado oscuro de internet se puede comerciar con ellas, desde pornografía
infantil hasta comercio de narcóticos y asesinatos por encargo, todo esto
porque una criptomoneda es anónima y nadie podrá saber quién la usó si sabes
protegerte en la web a través de herramientas que enmascaran tu IP.
Esto es lo preocupante, el régimen de Venezuela ha estado
usando esto pero ahora quiere que sea legal, para así terminar de desfalcar a
la nación sin que nunca nadie sepa dónde está el dinero robado.
Pero ahora, ¿por qué pasa esto en un país donde la mayoría
de sus ciudadanos tiene decencia y valores democráticos?
Muchos dirán: pues porque es una dictadura, y es cierto,
pero también porque no hay una estructura de poder que suplante al Chavismo.
Ahí es a dónde vamos, la única salida del conflicto en Venezuela, pasa por una
acción armada, es la única forma de derrotar militarmente a una dictadura
militar como la de Venezuela.
En el exterior, habitan miles de venezolanos con diferentes
mentalidades, mucho de los cuales desean con fervor recuperar su país, que
tienen un modo de vida que no eligieron pero que les tocó vivir. Ahora, ese
pueblo no tiene ningún liderazgo y mientras ese liderazgo no exista veremos a
los chavistas afianzados en el poder destruyendo nuestro país.
Ahora para crear una estructura de poder se necesita un
liderazgo moralmente capaz, financieramente operativo y políticamente claro.
Los venezolanos cuentan con un Tribunal Supremo legítimo en el exilio, cuentan
con una Asamblea Nacional electa democráticamente, estos dos órganos pudiesen,
el primero destituir al presidente y demás miembros del régimen por sus violaciones
a la constitución legitima de 1999 y nombrar un gobierno provisional que arme
una nueva Fuerza Armada y con la ayuda de países aliados intervenga para
neutralizar por acción militar a la dictadura actual.
Esto suena radical, y lo es, solo una acción radical salvará
a Venezuela de 15 años más de tiranía, opresión y entrega de nuestro país a
intereses chinos y rusos, una vez derrocados los miembros del régimen,
posterior a la derrota militar del chavismo, se debe proceder a juzgar a todos
los responsables de la crisis incluso a aquellos de menor participación.
Solo así se podrán tomar medidas que ayuden a desmontar el
socialismo, neutralizar los grupos criminales dentro de Venezuela y generar un
cambio positivo al tercer año.
De no ser así, el conflicto venezolano inevitablemente,
afectará a la región en una crisis que aún no somos capaces de ver pero que ya
se perfila en las fronteras de Venezuela, como dijo Simón Bolívar, “¿Calma? Es que
acaso de 300 años de calma no bastan..." En nuestras manos esta salvar a
Venezuela de 15 años más de muerte lenta o perderla para siempre a mano de un
puñado de comunistas ignorantes.
Como venezolano me niego a creer que la única solución sea
esperar a que los corruptos militares de la Fuerza Armada Chavista quieran derrocar
a Maduro y también me niego a creer que debamos perder el país para siempre. Como
venezolano en el exterior no olvido, ni podré olvidar las penurias y angustia
que sufre nuestro pueblo y lamento que mi mayor aporte sean estas palabras de
reflexión para quienes me leen.
Recuerden Boves hizo daño hasta que lo mataron y como dijo
Dante Alighieri “los lugares más calientes del infierno están reservados para
quienes en tiempos de crisis moral se mantienen neutrales”, no olvidemos que
Bolívar tuvo que exiliarse varias veces y organizar venezolanos y pedir apoyo a
otros países como Inglaterra, Haití, las Provincias Unidas de Nueva Granada
para poder libertar Venezuela, no podemos los hijos de Bolívar ver perder la
libertad a manos de comunistas cubanos, chinos y rusos.
Pensemos en el liderazgo y en la estructura de poder que
debemos construir para recuperar a Venezuela de la tiranía y la ignorancia.
Carlos Leal Ollarves
No hay comentarios:
Publicar un comentario